Por Balmore Reyes
En el marco de su compromiso con la inclusión y el reconocimiento de los derechos de las personas con discapacidad, la Universidad anuncia una semana conmemorativa en septiembre, coincidiendo con el Día de la Persona con Discapacidad Auditiva y el Día del Intérprete de Lengua de Señas.
La Unidad de Educación Superior Inclusiva de la Universidad de El Salvador, antes conocida como la Unidad de Atención a Estudiantes con Discapacidad, lidera esfuerzos significativos para garantizar un acceso equitativo y una educación inclusiva en la Universidad de El Salvador. Con un cambio de nombre que refleja su enfoque y misión, la unidad busca brindar servicios de apoyo en el ámbito académico y administrativo para los estudiantes con discapacidad.
Según la Licda. Rosario Villalta, coordinadora de la Unidad de Educación Superior Inclusiva, el cambio de nombre fue una medida estratégica para evitar equivocaciones sobre el tipo de servicios que se ofrecen: «Se cambió la palabra ‘Atención’ porque a veces se malinterpreta o se puede pensar que es un servicio médico. En realidad, aquí brindamos servicios de apoyo en el área académica y administrativa».
La unidad ha desplegado una serie de iniciativas para garantizar la inclusión de estudiantes con discapacidad. Esto incluye la asignación de intérpretes de lengua de señas, la entrega de información y bibliografía en formatos accesibles, así como la creación de la primera biblioteca Braille a nivel superior. Además, se están desarrollando cursos de lengua de señas y lectura braille, así como programas de formación para el personal docente y administrativo en el uso de tecnologías de apoyo.
Asimismo, la unidad colabora en un proyecto con la Liga Española de la Educación y la Cultura Popular (LECP) y la Agencia de Extremadura. El proyecto tiene tres componentes clave: infraestructura, formación e investigación.
En cuanto a la infraestructura, se ha construido una guía podotáctil en el campus universitario, que facilita la movilidad de personas con discapacidad visual. En el ámbito de la formación, se desarrollan cursos de lengua de señas, lectura braille, derechos humanos y tecnología de apoyo para estudiantes con discapacidad.
El tercer componente es la investigación, que se enfoca en identificar la lengua de señas utilizada en la educación superior, ya que difiere de la lengua de señas convencional. Esta investigación dará como resultado la creación de un Diccionario de Lengua de Señas a Nivel Superior.
Según la Licda. Villalta, este diccionario tiene como objetivo facilitar la comunicación y el acceso a la información para estudiantes con discapacidad auditiva: «Estará en formato físico impreso, pero también vamos a tener una versión digital interactiva con secuencias de fotografías y códigos QR que enlazan a vídeos de las señas correspondientes» para mayor claridad. La presentación oficial está programada para el 22 de septiembre y contará con la colaboración de expertos en lingüística, así como la participación activa de estudiantes con discapacidad auditiva.
La Licda. Villalta enfatizó que este recurso beneficiará a toda la comunidad universitaria: «No solo capacitará al personal docente y administrativo, sino que también empoderará a los estudiantes sin discapacidad para comunicarse de manera efectiva».
Con respecto a la respuesta a estas iniciativas, Villalta destacó que durante la validación la recepción fue positiva por parte de la comunidad sorda y de organizaciones relacionadas con la discapacidad auditiva. El presidente de Fonda Sordo, por ejemplo, expresó que el diccionario era un material esperado desde hace años y que su realización es motivo de celebración.
La Unidad de Educación Superior Inclusiva también está organizando eventos conmemorativos en septiembre para destacar la importancia de la inclusión y la concienciación sobre la discapacidad auditiva. A través de webinarios y actividades, buscan sensibilizar a la comunidad universitaria y motivar a los jóvenes con discapacidad a continuar su educación superior.
En un esfuerzo constante por crear un ambiente verdaderamente inclusivo, la UES se encuentra comprometida en un proceso de cambio que beneficia a todos y todas. La labor de la Unidad de Educación Superior Inclusiva es un inspirador ejemplo de cómo la educación puede ser un medio para la igualdad y el empoderamiento de todos los estudiantes, independientemente de sus capacidades.
